La modalidad de “la nueva normalidad” traerá consigo un cambio de hábitos de consumo como el buy and pickup y el uso de plataformas digitales de delivery qué representarán un desafío para el sector comercial.

El panorama general el confinamiento por COVID-19 luego de la declaratoria de la fase 3 en México acompañada de la cuarentena generalizada de la población, empujó a que los comercios adopten estrategias innovadoras que les permitan agregar valor al consumidor.

Retail, inició con un alza en las ventas en el autoservicio y en el sector salud motivada por las compras de pánico, el e-commerce también mostró incrementos en determinadas categorías, en donde la ventaja competitiva de algunos comercios que ya contaban con respaldo logístico para recibir y atender pedidos de manera eficiente hizo que sus ventas no solo se mantuvieran, sino repuntarán; aquellos comercios sin este tipo de respaldo se han enfrentado al reto de desarrollar estrategias para mejorar sus operaciones, tanto en el abastecimiento como en la entrega de pedidos.

Al mes de mayo del 2020 el inventario de centros comerciales en México en sus diferentes tipos y superficies mayor a 10 mil M2 cerró con 24.5 millones de M2 concentrados en 814 desarrollos.  Se espera que una vez que de manera escalonada se reactiven las actividades de construcción y bajo las nuevas medidas de sanidad se reprograme la entrega de los desarrollos, así mismo se buscará la adopción por parte de los comercios a las nuevas prácticas y hábitos del consumidor para poder satisfacer la demanda encaminados a una “nueva normalidad”.

Como consecuencia del confinamiento por la emergencia sanitaria, se espera que los indicadores del mercado comercial se vean afectados en los siguientes meses, así mismo se vislumbra una lenta recuperación en el mercado, aun cuando desarrolladores e inquilinos han implementado estrategias propias para incentivar la reactivación.

La vacancia de espacios comerciales cerró en 2.8 millones de M2, que corresponden al 11.4% del inventario existente, se estima que en el periodo de confinamiento la vacancia aumente debido al cierre forzoso de comercios ya actividades no esenciales, por lo que la ocupación de los espacios será paulatina debido a que el regreso a la “nueva normalidad” será escalonado y con ciertas medidas de distanciamiento social.

CONSTRUCCION

Las fechas de entrega de espacios de desarrollo aún no son ciertas debido a la pausa en las actividades de construcción, sin embargo, se espera que en los próximos 36 meses se reprograme la entrega de los 2.4 millones de M2 en construcción, distribuidos en 65 centros comerciales en las distintas zonas del país. 

NUEVAS MARCAS

Aun cuando desde inicios del año se sabía de emergencia sanitaria, el 1T 2020 registró la llegada de 6 nuevas marcas a México, mientras que durante el 2019 llegaron siete, el 38% de éstas son de origen Estadounidense. Por otro lado, hay otras marcas que están volteando, a ver a México como un potencial consumidor, algunas de ellas son comercializadoras de automóviles de origen Chino y minoristas Estadounidenses con el formato de pick and go (tomas y te vas). Respecto al giro, predominan con 50% las marcas de ropa y accesorios, seguidos por marcas de alimentos y bebidas. Se espera que con la firma del nuevo tratado de Comercio T-MEC se pueda diversificar aún más esta oferta.

E-COMMERCE CONTRA COMERCIO TRADICIONAL

A raíz del confinamiento los comercios están buscando la forma de adaptarse a los nuevos hábitos de consumo, ofreciendo una propuesta de valor integrada entre la tienda física y el comercio electrónico, garantizando que ambas ofrezcan una experiencia de compra satisfactoria.

La integración de las plataformas encargadas de la entrega de productos (delivery) al proceso de compra está siendo cada vez más común por lo que la adopción de modalidades self check out y pick and go representan un área de oportunidad para los comercios para adaptarse a las nuevas condiciones.

La Asociación Mexicana de ventas online (AMVO) en su último estudio del 2020 señala que la frecuencia de compra en línea ha aumentado en los últimos años y durante el confinamiento la compra de comida artículos de supermercado y juguetes tuvieron un incremento superior al 30%.

En la medida en que se adoptó el confinamiento la categoría juguetes, así como software y hardware fueron productos con mayor demanda por la adopción del Home Office.

En México, el comercio electrónico ha cobrado relevancia en los últimos años, desde el 2015 el Banco de México inició con el segmento de operaciones con tarjetas en sitios de comercio electrónico, en 2015 se registraron poco más de 37 millones de transacciones, mientras que durante 2019 se registraron más de 422 millones de transacciones, lo que representa un incremento 10 veces mayor. De 2018 a 2019 hubo un aumento del 48% en el número de transacciones y un 29% de aumento en el monto, superando los 246 millones de pesos.

LA NUEVA NORMALIDAD

El Gobierno de México presentó un plan para el regreso a la “nueva normalidad” en este los centros comerciales podrán reanudar operaciones de forma escalonada, es decir, los locales abrirán dependiendo de su giro y de la afluencia de visitantes que generan, así mismo, se buscará la implementación de reglamentos de distanciamiento social en los que se controle el ingreso con filtros sanitarios y se mida la capacidad de las áreas comunes.

Los corredores corporativos de oficinas y centros de negocio jugarán un papel fundamental para la reapertura, pues su flujo de personas es el principal motor de la demanda comercial.

La modalidad de “la nueva normalidad” traerá consigo un cambio de hábitos de consumo como el buy and pickup y el uso de plataformas digitales de delivery qué representarán un desafío para el sector comercial.

De su capacidad de adaptación al cambio dependerá el mantener y consolidar su ventaja competitiva para satisfacer las nuevas prácticas de la demanda de los consumidores.

La incertidumbre en torno al COVID-19 está teniendo un impacto directo en el mercado inmobiliario particularmente en el sector retail y su impacto total es desconocido y dependerá en gran medida de la escala y longevidad de la pandemia. Si bien hemos tomado medidas razonables para evitar el efecto COVID-19 en la propiedad, debido a la importante incertidumbre en la economía, los mercados de capitales y el rápido desarrollo de estos eventos, es difícil cuantificar y evaluar el impacto que tiene la pandemia, ha tenido y tendrá sobre el sector.