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La oferta de grado de inversión: La historia en 2021

Por Jack Janasiewicz, Estratega en Jefe de Portafolio de Natixis IM

Uno de los temas que hemos comentado en torno a la renta fija es el entorno de la oferta y la demanda para el 2021. ¿Por Qué debe importarnos esto? Porque demasiada demanda o muy baja demanda movilizan a los precios. Al igual que el exceso o falta de oferta. Así de simple. La oferta y demanda mueven los precios de los activos. No necesitamos complicarnos demasiado.

La preocupación por la seguridad

Hemos comentado ya acerca de la escasez de “refugios seguros” o activos de calidad en el mundo.

Existe una necesidad imperiosa de segmentos específicos de los mercados (fondos de pensiones, aseguradoras, fondos con vencimiento, etc.) de continuar con su tenencia y acumular más.

Para más información, podemos analizar lo que pasa en lo que llamo “terreno del Grado de Inversión.” La tabla a continuación muestra lo que hemos visto con base histórica para la emisión bruta del grado de inversión (IG).

La gráfica a continuación muestra la emisión IG neta, lo que toma en consideración lo que se has redimido o recomprado. En otras palabras, si un bono se vence y se emite uno nuevo para remplazarlo, la emisión bruta refleja solamente el nuevo lado de la emisión. No toma en consideración la idea de que el préstamo original ya se ha extendido. En contraste, los números de la emisión neta representan esta continua actividad de préstamos.

El avance

Pronosticar la oferta es siempre una labor muy capciosa e imprecisa, pero la tendencia es la clave – observemos la caída masiva en los pronósticos para 2021. Donde 2020 registró un alza en emisión bruta de 55%, con un alza en emisión neta de 32%, y hoy vemos una caída estimada en la emisión bruta de 48% – 92% en términos netos.

Esto tiene lógica. ¿Por qué? Las corporaciones se apresuraron a apuntalar sus balances y aumentar efectivo cuando la Fed salvaguardó los mercados a principios de la pandemia. Emitieron bonos a discreción y los saldos de efectivo escalaron. En términos muy simples, las corporaciones impulsaron sus calendarios de emisiones hasta abril y mayo de 2020.

Como resultado, vimos la acumulación de más de US$1 billón hacia fondos del mercado de dinero de marzo a julio. Algo de esto lo constituyó el efectivo corporativo recién recabado. Algo más fueron fugas de flujos comerciales. No debe sorprendernos que los emisores de Grado de Inversión hayan recabado unos US$653 mil millones en oferta bruta (y $183 millones en neta) durante dicho periodo.

¿Y ahora qué sigue?

Ahora, las corporaciones descansan en demasiado efectivo. ¿Qué les corresponde hacer? Para empezar, probablemente no van a emitir más deuda, a menos que por alguna razón deban hacerlo. Pueden recomprar acciones, pueden recomprar su deuda.

Pueden usarla para sus gastos de capital. Pueden recurrir a fusiones y adquisiciones…

Pero analicemos el historial de diferenciales para el IG –o la diferencia en rendimiento entre los bonos del Tesoro de EEUU y el IG en el tiempo con los vencimientos comparables. Se alcanzó un mínimo pre-Crisis Financiera Global el 11 de marzo d 2005 de +76 puntos base (ver: flecha roja). Alcanzamos un mínimo post-Crisis Financiera Global el 1 de febrero, 2018 de +85 puntos base (ver: otra flecha roja). Cuando se redactó el presente texto (15 de enero, 2021), nos encontramos en +93 puntos base.

La pregunta es, ¿están los mercados listos para crear un nuevo mínimo histórico? Dado el entorno de la oferta y la demanda que mencioné anteriormente, apostaría que la respuesta es “probablemente sí.” Junto con una recuperación económica que continúa ganando impulse lentamente ante la distribución de una vacuna Covid-19, lo que se traduce en mejores fundamentales, la respuesta podría incluso ser “muy probablemente, sí.”

Si bien ciertamente existe un riesgo de duración en el grado de inversión (el índice avanza a 8.74 años – ¡uf!), hay margen para un rally en los diferenciales. Por lo que si bien un refuerzo en el rendimiento de los bonos del Tesoro operaría en contra del IG, esto puede compensar lo anterior con una contracción de los diferenciales en medio del entorno ya definido. Podría no tratarse de un jonrón, y podría no ser fácil de asimilar si se empieza con un rendimiento al vencimiento en el índice de 1.87% – pero si se está en conversaciones con inversionistas que buscan renta fija de calidad, esta es probablemente una historia que vale la pena contar.

Oferta y demanda – esto es lo que mueve a los precios. Al parecer, la oferta de Grado de Inversión va a ser escasa en 2021 ya que se alargó hasta el 2020 a consecuencia de la pandemia y la respuesta de la Fed.

La demanda probablemente escalará aún más. Este es el caso para el IG en 2021: oferta < demanda.

Jack Janasiewicz
Estratega en Jefe de Portafolio de Natixis IM
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