De acuerdo con datos del Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI), hasta septiembre de 2020 se iniciaron 372 solicitudes de infracción y medidas provisionales respecto de Derechos de Propiedad Intelectual, mientras que en 2019 fueron 1,448. En México, este tipo de procedimientos contenciosos y medidas tienen que ver con el uso indebido de una marca, es decir, con el hecho de si un tercero fabrica, distribuye y/o hace uso de una marca registrada sin autorización de su titular, o bien una marca similar en grado de confusión a la misma.

Suele suceder que las empresas creen que por utilizar una marca durante 10 años o más ya están
exentos de enfrentar estos problemas o cuando quieren registrar su marca, ya no pueden porque
ya existe un registro que protege la misma. Por ello, es importante identificar que lo que se está
haciendo se puede proteger, o en su caso no estar invadiendo derechos de terceros; de este
modo, evitan enfrentar un problema de más de 20 millones de pesos e incluso, un valor que pueda
costarles su empresa misma.

Por lo regular, los infractores tienden a esconder sus huellas, de ahí que se deba contar siempre
con las evidencias necesarias para demostrar que hay una conducta infractora; de ser así, en su
momento como titular puedes pedir que se prohíba la comercialización de este, o bien si se
localiza, puedes asegurarlo. Solo de este modo ya no van a seguir perjudicando a la empresa
titular de una marca. En esta situación también se puede considerar ver si se trata de una
falsificación y ver la implicación penal de dicha conducta, cuyos pasos a seguir dependerán de lo
que se descubra durante la investigación, ya sea que corresponda a la índole penal o
administrativa.

Por su parte, para asegurar que tu empresa no está infringiendo los derechos exclusivos de
alguien más, es importante hacer búsquedas en las bases de datos del IMPI respecto de lo que se
pretende proteger, para verificar si es posible protegerlo, o si ya se encuentra protegido. Lo ideal
es siempre estar alineado y tratar de ver cuáles son las mejores opciones para protección y
también no invadir a terceros.

En nuestro país, el IMPI, es el único encargado de determinar la imposición de multas para
aquellos que infringen una marca, considerando claro la gravedad, intención y condiciones
económicas del infractor, pues esto puede variar dependiendo de si el infractor vende en vía
pública o si es una empresa establecida. Ahora, si el propietario de la marca registrada prefiere
optar por la vía civil, actualmente puede ahí solicitar de inicio el pago de daños y perjuicios sufridos por dicha conducta.

Con la nueva Ley Federal de Protección a la Propiedad Industrial se espera un cambio positivo
debido a que contiene inclusiones que favorecen la protección de los derechos de titulares de
marcas; con estos ajustes la Ley es más clara, ordenada y moderna. Incluso las cuestiones que
antes eran de la propia práctica, ya se encuentran más establecidas.

Sin duda, la protección y la vigilancia son elementos indispensables para que las empresas estén
seguras. Especialistas de ClarkeModet, empresa líder en temas de Propiedad Industrial e
Intelectual, recomiendan tener políticas de vigilancia y una asesoría especializada, ya que solo una firma consultora especializada puede brindar una estrategia, estar al pendiente de que terceros no infrinjan la marca registrada y, en caso de existir alguna infracción, valorar la mejor solución.

Como estrategia para enfrentar la infracción, las empresas siempre tienen que ir al origen,
procurando investigar quién es el responsable y atacar directamente. Evita llevarte sorpresas
desagradables, toma precauciones, registra tu marca y monitorea que no existan terceros
utilizándola una similar que se confunda con la misma.