Las medidas de sanitarias establecidas para frenar el avance del Covid-19 causaron que muchas empresas decidieran cerrar o reorganizar a los colaboradores en modalidad teletrabajo -cada uno en su casa-, algo totalmente nuevo para la mayoría. Esto trajo como consecuencia que la cultura centralizada en una oficina, tan arraigada en muchas compañías en México se modificara para dar vida a la “nueva forma de trabajar”.

Lo que al comienzo pudieron ser ventajas del home office, como levantarse más tarde, ahorrar tiempo de traslado, usar ropa más cómoda, almorzar en familia, entre otros; hoy, más de un año después, muestra retos importantes para los colaboradores. La falta de concentración al estar a la vez a cargo de los hijos o de las tareas domésticas, el cansancio de la conectividad tecnológica y, sobre todo, la pérdida de la relación cotidiana con los compañeros, hacen que la oficina se transforme en una especie de oasis que algunos añoran por momentos y con nostalgia. No sólo por contar con un espacio libre de interrupciones y pausas, sino también por la interacción formal e informal entre colegas y equipos de trabajo.

“Al principio, trabajar desde casa tenía sus ventajas, pero con el tiempo comenzamos a notar que algo nos hacía falta. El poder conectar con tus colegas, intercambiar ideas y simplemente tener un lugar adecuado para concentrarte, se hizo más necesario que nunca”, comentó al respecto Álvaro Villar, Director de WeWork en México.

Esa pérdida de conexión entre colaboradores ha sido uno de los principales debates de expertos en materia de recursos humanos. En la Cumbre de Innovación de WeWork 2021, que se desarrolló a fines de abril y que congregó a distintos líderes mundiales de opinión del ámbito empresarial, se discutió acerca de cómo recuperar el sentido de pertenencia y cultura corporativa entre equipos remotos.

Entre los consejos entregados por los expositores encontramos recomendaciones sencillas y prácticas de aplicar, tales como:

Hacer una llamada corta de 5 minutos es preferible a enviar un correo que toma 30 minutos escribir, y que no todos leen.
Prender la cámara en las reuniones virtuales, siempre es bueno verse. No hacerlo puede tomarse como falta de interés. Los backgrounds han sido clave para este ejercicio.
Todos están a un clic de distancia. Aprovechar las comunicaciones abiertas para entrar en contacto con líderes u otros compañeros de trabajo de la empresa.
Programar eventos virtuales distintos que creen ambientes colaborativos, más relajados y creativos, más allá de la típica reunión de coordinación.

Los expertos creen que en un contexto post-pandemia habrá un mayor sentimiento de pertenencia a la oficina. “En Israel vimos gente corriendo a la oficina y abrazando a sus compañeros, sintiendo esa pertenencia nuevamente”, contó a modo de anécdota Boaz Inbal Gerente de Wix.com. “Hay personas con hijos que extrañan la oficina y el café con los compañeros, pero otros que no sienten la necesidad de volver porque trabajan bien en casa”, añadió.

Y en esa dualidad es donde las empresas deben encontrar la mejor fórmula para adaptarse a las nuevas necesidades y preferencias de los colaboradores. “Programar modelos híbridos inteligentes será el desafío de las organizaciones. Que los colaboradores sientan que su tiempo en la oficina vale la pena. Volver a sentir la vibra y conexión de la oficina”, señaló L.J. Louis, vicepresidenta de talento de liderazgo, inclusión y diversidad de WeWork.

Los expositores también coincidieron con que lograr esa fórmula de flexibilidad inteligente será decisiva a la hora de atraer nuevos talentos. Alex Campos, CEO de Vensure Employer Services Inc., comentó que “antes las contrataciones se concentraban en el lugar geográfico. Ahora hay un cambio positivo, el lugar geográfico no tiene tanta importancia si puedes desempeñar bien tu trabajo remotamente. Sin embargo, el relacionamiento entre compañeros sigue siendo un tema relevante”.

Un estudio de WeWork y WorkPlace Intelligence, compañía de asesoría en recursos humanos, que encuestó a 2.000 empleados y ejecutivos, señaló que un 95% de los colaboradores, en una situación post Covid-19, preferirán volver a las empresas en un modelo híbrido en el que puedan elegir trabajar desde la casa, oficina o cualquier otro ambiente que les resulte más cómodo. Incluso el 75% de ellos estaría dispuesto a cambiar otro beneficio laboral por tener el poder de decidir desde donde trabajar.

Ante este panorama, contar con un ambiente laboral agradable en un espacio de trabajo seguro, con las comodidades y conexiones necesarias para fomentar el relacionamiento entre los colaboradores es el desafío que enfrentarán las empresas post-pandemia.