El peso cerró la sesión con una depreciación de 0.85% o 16.92 centavos, cotizando alrededor de 20.06 pesos por dólar, con el tipo de cambio tocando un mínimo de 19.8761 y un máximo de 20.0933 pesos. La depreciación del peso ocurrió a la par de la mayoría de las divisas en la canasta amplia de principales cruces, al elevarse la percepción de riesgo en los mercados financieros.

La mayor percepción por riesgo se debió a dos factores principales:

1) El incremento en los casos de coronavirus alrededor del mundo. Los contagios de coronavirus a nivel global muestran un incremento del 140% en los últimos 14 días, mientras que las muertes han avanzado 33% en el mismo periodo. Lo anterior, implica un riesgo especialmente para las economías que permanecen rezagadas en su proceso de vacunación, pues se podrían imponer nuevas medidas de confinamiento.

2) La probabilidad de que se vuelvan a incrementar las tensiones entre China y Estados Unidos. Hoy, Estados Unidos y Reino Unido, atribuyeron formalmente el hackeo de Microsoft Exchange, a afiliados del gobierno chino. Lo que se agrega a la advertencia de la Casa Blanca, en la que señaló el riesgo que existe para las empresas al realizar negocios en Hong Kong, debido a que China sigue reforzando su control sobre el territorio.

En el mercado cambiario, únicamente 2 de las 31 divisas incluidas en la canasta amplia de los principales cruces frente al dólar mostraron ganancias: el yuan japonés (+0.54%) y el franco suizo (+0.15%), ambas consideradas activos refugio. El peso mexicano se ubicó como la sexta divisa más depreciada, por detrás del real brasileño (-2.53%), el peso colombiano (-1.16%), la corona noruega (-1.14%), el sol peruano (-1.09%) y el dólar canadiense (-1.04%).

El efecto de mayor aversión al riesgo fue evidente en el mercado de capitales, en donde los principales índices a nivel global cerraron con pérdidas amplias. En Europa, los principales índices perdieron en promedio cerca de 2.5%, con el FTSE 100 de Londres retrocediendo 2.34% y el DAX de Alemania perdiendo 2.62%. En Estados Unidos, el S&P 500 perdió 1.59%, el Dow Jones retrocedió 2.09% y el Nasdaq perdió 1.06%. El nerviosismo en el mercado bursátil se da ante la expectativa de que la nueva ola de contagios, impulsada por la variante Delta, frene la recuperación económica. En el mercado de bonos el nerviosismo, elevó la demanda por activos libres de riesgo, haciendo que la tasa de los bonos del Tesoro a 10 años disminuyera 9.8 puntos base a 1.19% tocando un mínimo de 1.1723% no visto desde el 12 de febrero.

Otro factor que contribuyó con la depreciación del peso fue la caída en los precios del petróleo. El WTI tocó un nuevo mínimo de 65.63 dólares por barril, no visto desde el 27 de mayo, y cerró con una caída de 8.04%. La disminución en los precios del hidrocarburo se debió a 1) el avance en la pandemia y 2) el acuerdo de la OPEP y sus aliados (OPEP+) para aumentar la producción petrolera en 400 mil barriles diarios en lo que resta del año.

En la sesión, el euro tocó un mínimo de 1.1764 y un máximo de 1.1824 dólares por euro. Por su parte, el euro peso tocó un mínimo de 23.4498 y un máximo de 23.7052 pesos por euro.

Al cierre, las cotizaciones interbancarias a la venta se ubicaron en 20.0614 pesos por dólar, 1.3670 dólares por libra y en 1.1798 dólares por euro.

En la sesión, el Indicador Base de Percepción de riesgo global (IBP) se ubicó en 204 unidades, lo que significa percepción por riesgo alto, siendo esta la tercera sesión consecutiva en la que se observa percepción por riesgo en los mercados. En la jornada, se observa un episodio de fuerte incertidumbre en los mercados ante la propagación de la cepa Delta de coronavirus.

Al interior del indicador, los componentes de mercado de divisas, dinero, capitales, commodities y riesgo país fueron consistentes con mayor percepción por riesgo.

El oro cerró la sesión con pérdidas, cotizando en 1,811.65 dólares por onza, con una reducción en su precio de 0.02%, lo que se da a la par de un fortalecimiento generalizado del dólar estadounidense que, llevó al índice ponderado a incrementar en 0.32%. Hay que recordar que, el fortalecimiento del dólar reduce la demanda por commodities, al hacerlos menos accesibles para inversionistas que tienen otra divisa.

El fortalecimiento del dólar se da ya que, en los mercados financieros globales, se observa un incremento de la percepción de riesgo principalmente ante el aumento en los casos de coronavirus relacionados con la variante Delta. Cabe destacar que, el número de casos en el sudeste asiático sigue en aumento, con Indonesia superando a India y Brasil en número de casos diarios. Singapur ha notificado 172 nuevos casos el lunes, un aumento significativo con respecto a la semana pasada, mientras que en Tailandia se reportaron 11,784 nuevos casos.

Sin embargo, el aumento en la percepción por riesgo y la posibilidad de que la nueva cepa de coronavirus ralentice la recuperación económica limitó las pérdidas.

Asimismo, los metales industriales cerraron la sesión con pérdidas ante el aumento en la percepción por riesgo a nivel global y el fortalecimiento del dólar estadounidense. Hay que mencionar que, el aumento en el número de casos de coronavirus amenaza la recuperación económica global, lo que a su vez aumenta el nerviosismo en torno a la demanda.

Adicionalmente, la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma mencionó durante el overnight, que China reforzará el control de los precios de las materias primas y seguirá vendiendo cobre, aluminio y zinc de sus reservas estatales. Cabe recordar que, el 5 de julio vendió 20 mil toneladas de cobre, 50 mil toneladas de aluminio y 30 mil toneladas de zinc.

Ante esto, el precio del níquel se redujo 3.19% y finalizó cotizando en 18,462 dólares por tonelada métrica, mientras que, el precio del cobre cerró la sesión cotizando en 9188.5 dólares por tonelada métrica, con una reducción en su precio de 2.16%. Asimismo, el zinc cerró la sesión cotizando en 2,977 dólares por tonelada métrica, con una disminución en su precio de 0.87%, mientras que el precio del aluminio cerró la sesión cotizando en 2,425.5 dólares por tonelada métrica, con una reducción en su precio de 2.53%.

Finalmente, los commodities agrícolas cerraron la sesión con resultados mixtos.

Las presiones al alza para el precio de los granos se dieron ante el clima adverso en Estados Unidos, Canadá, Europa y Rusia. Desde el clima seco en el continente americano, hasta las lluvias torrenciales en Europa se incrementaron las preocupaciones por los suministros mundiales.

No obstante, el incremento en la percepción por riesgo y la publicación de las inspecciones a las exportaciones de Estados Unidos, presionaron a la baja los precios de los granos. De acuerdo con el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés), las inspecciones de exportación de maíz se redujeron ligeramente con respecto a la semana anterior. Para el caso del maíz, las inspecciones se redujeron en 0.18% a 1 millón de toneladas, durante la semana que terminó el 15 de julio, mientras que para el caso de la soya se redujeron en 28.44% a 143.93 mil toneladas. Por el contrario, para el caso del trigo las inspecciones aumentaron en 14.68% a 490.63 mil toneladas.

Ante esto, el precio del maíz se incrementó 0.05% y cerró cotizando en 5.52 dólares por bushel, mientras que la soya cerró la sesión cotizando en 13.75 dólares por bushel, lo que equivale a una reducción en su precio de 1.20%. Mientras tanto, el precio del trigo cerró la sesión cotizando en 7.00 dólares por bushel, lo que equivale a un aumento de 1.16% en su precio.

El WTI cerró la sesión cotizando en 66.04 dólares por barril, lo que equivale a una reducción en su precio de 8.04%, siendo esta su mayor reducción diaria desde junio del 2020. En la sesión, el WTI alcanzó un máximo intradía de 71.67 dólares por barril y un mínimo de 65.63 dólares, no visto desde el 27 de mayo. Mientras tanto, el precio del brent se redujo en 7.32% a 68.2 dólares por barril. En la sesión, las principales mezclas de petróleo fueron las mayores perdedoras ante dos factores:

1. El aumento en la percepción por riesgo generada principalmente por el aumento en los casos de coronavirus, lo que a su vez causó que el dólar estadounidense se fortaleciera, llevando al índice ponderado a incrementar 0.32% durante la sesión. Hay que recordar que, el fortalecimiento del dólar reduce la demanda por commodities, al hacerlos menos accesibles para inversionistas que tienen otra divisa.

Asimismo, las preocupaciones en torno a la demanda se dan puesto que el número de casos de coronavirus amenaza la recuperación económica global, mientras que podría significar la reimposición de medidas de confinamiento, lo que también reduciría la demanda.

2. La OPEP y sus aliados (OPEP+) alcanzaron un acuerdo para aumentar mensualmente la producción petrolera conjunta en 400 mil barriles diarios de agosto a diciembre. El acuerdo se da tras dos semanas consecutivas de volatilidad, mientras Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos resolvían una disputa.

Finalmente, la mezcla mexicana de exportación cerró la semana del 16 de julio cotizando en 67.88 dólares por barril, lo que equivale a una reducción semanal de su precio de 3.10%.