Durante la sesión, el DXY recupera algo de terreno marginal, no así frente al peso mexicano. Después de la decisión de Banxico de la semana pasada de subir la tasa de interés en 50 puntos base (pb) hasta el umbral del 11%, se ha estimulado una oleada favorable para el peso mexicano.

Desde la perspectiva del gráfico diario, el peso sigue manteniendo una tendencia favorable, ya que las medias móviles diarias se mantienen por encima del precio spot. A pesar de que el dólar emparejó algunas de las pérdidas del viernes pasado, permanece una marcada presión de venta que podría cambiar a neutral si el dólar logra romper la resistencia de la media móvil exponencial (EMA) de 50 días, en 19.08 pesos por billete verde.

Indicadores como el índice de fuerza relativa (RSI) apuntan a la baja, por lo que se espera una mayor apreciación de la moneda mexicana.

A nivel intradiario, el gráfico sugiere que el par podría consolidarse en la zona de 18.50-19.00 unidades, con el dólar incapaz de superar los niveles de soporte y resistencia.

Se está formando una cuña descendente mientras el par toca fondo en la zona de 18.60 unidades, lo que exacerbaría un movimiento alcista para el dólar, aunque hay algunas resistencias clave que los compradores deben combatir para elevar el tipo de cambio hacia 19.00 pesos por billete verde. Una ruptura por encima de la media móvil exponencial (EMA) de 20 días, en 18.67, enviaría el par hacia 18.73, lo que, una vez superado, abriría la puerta a nuevas pérdidas para el peso, hacia la EMA de 100 días, en 18.79, y la EMA de 200 días en 18.82.