Uno de los puntos más importantes para la economía circular es la reutilización de recursos, el uso de materiales que se pueden recuperar y que tienen una larga vida útil. Esta práctica es eficiente tanto para no generar desperdicios, como para reducir costos para las empresas. La cadena de suministro, especialmente la parte del proceso inicial de transporte y almacenamiento de carga juega un papel fundamental en el escenario de la economía moderna.

Antes de que los refrigeradores estuvieran en prácticamente todos los hogares del mundo, era bastante común el servicio de entrega de leche a domicilio, hecho por los productores lecheros que traían el insumo directamente de la granja. Esta entrega se realizó en botellas de vidrio retornables. Los refrescos también se vendían, hasta hace muy poco, en botellas retornables, que el consumidor necesitaba llevar al mercado.

Este hábito fue una forma consistente de preservar los materiales y practicar una economía más circular, un concepto que asocia el desarrollo económico con un mejor uso de los recursos naturales, a través de nuevos modelos de negocio y optimización en los procesos de fabricación con menor dependencia de materias primas vírgenes, priorizando ingredientes más duraderos, reciclables y renovables. Este sistema que utiliza envases retornables puede llamarse logística inversa y sigue presente en muchos procesos de entrega y almacenamiento de mercancías, ya sean bebidas, alimentos, cosméticos e incluso automóviles.

Desde un punto de vista logístico, el ciclo de vida de un producto no termina con su entrega al cliente. En este caso el concepto de logística inversa es más amplio. Como su nombre lo indica, consiste en hacer que los productos y los residuos vayan en sentido contrario, pasando del consumidor a los productores. Por ejemplo, el reciclaje de botellas PET, la recolección de chatarra y otros materiales reutilizables.

La logística inversa es importante en la reutilización de tarimas -piezas de madera o plástico; son esenciales y utilizadas por diferentes sectores de la economía para el transporte y almacenamiento de carga en una empresa. Desde el inicio de su uso, la solución trae ganancias considerables en la productividad de la industria, además de reducir las pérdidas en el transporte y almacenamiento. También la podemos ver como un sistema que promueve: la reutilización; el reciclaje; el tratamiento y disposición final de los residuos generados para ser consumidos en otros productos.

Con el uso de pallets (tarimas) es posible hacer que el flujo de mercancías dentro y fuera de mercancías sea cada vez más ágil. Con una organización sistemática, es posible reducir el tiempo de entrega y aumentar la calidad del servicio que se ofrece. Las ventajas son muchas: reducción del tiempo de manipulación de la carga; mejor aprovechamiento de los espacios; simplificación del control de inventarios; reducción significativa de las averías, de accidentes de trabajo y del tiempo de carga y descarga de camiones.

Por lo tanto, una parte importante de la logística inversa es promover sus beneficios y, la más importante socialmente, es la contribución a la economía circular y al planeta. Así, los profesionales y empresas del sector trabajan arduamente con empresas y distribuidores para fomentar el correcto retorno a las empresas de logística y pooling -un modelo de negocio que permite una logística sustentable a través del uso y reutilización de pallets. La acción colaborativa, por lo tanto, es fundamental para lograr una mayor eficiencia en el comercio minorista y la industria, al tiempo que promueve una economía regenerativa.

Complementando lo anterior, de acuerdo con datos de la Secretaría de Economía de México, el 72% de los mexicanos hoy en día basan su preferencia hacia alguna marca de acuerdo con las acciones de sustentabilidad que implementa; esto indica una preocupación por cuidar el ambiente en todos los niveles. De este lado, ya es necesario que las empresas veamos más allá de reducir impactos, es momento de buscar una regeneración si queremos recuperar nuestros recursos naturales, sin dejar de lado los ahorros que esta práctica puede traer al negocio.