Las vacaciones de verano ya iniciaron, así que recordemos que en cada una de las salidas en las que viajamos, además de disfrutar y conocer nuevos lugares debemos ser turistas sustentables. Está comprobado que el turismo tiene un gran impacto en el medio ambiente, por ello es importante tomar medidas para tener unas vacaciones ecológicas.

Desde Vida Circular, hemos resaltado la importancia de cambiar los hábitos de las personas hacia un consumo más responsable y generar acciones que tengan menor impacto ambiental, por ello las vacaciones de verano o los viajes cortos representan una buena oportunidad para generar conciencia.

Si te estás preguntando cómo tener unas vacaciones sustentables sin morir en el intento acá te lo contamos:

+Elige el ecoturismo. Si decides salir de vacaciones, opta por lugares que sean 100% responsables con el medio ambiente y con las comunidades locales. Este tipo de turismo busca promover el conocimiento del entorno natural de una zona a la vez que genera conciencia al visitante de su conservación a través de elementos de educación ambiental.

+Busca alternativas sustentables de alojamiento. Investiga qué hospedajes cuentan con prácticas sustentables que optimicen el uso de recursos naturales para reducir el impacto en el entorno y así reducir la huella de carbono. De acuerdo con una plataforma digital, el 72% de las personas que viajan considera que deben tomar decisiones de viaje sostenibles para salvar el planeta.

+No dejes tu huella. Es muy importante prestar atención a dónde se deposita la basura en vacaciones y mucho más en entornos naturales protegidos. Procura tirar en cada contenedor los residuos correspondientes para su correcto reciclado.

+Usa alternativa de transporte. Utiliza medios de transporte sostenibles como bicicletas, trenes y transporte público para trasladarte de un lugar a otro. También aprovecha para caminar lo más posible y conocer todos los paisajes que puedas, desde un pueblo mágico, una playa, bosques hasta grandes ciudades.

+Respeta los ecosistemas: no importa si es una gran ciudad, una playa o un pueblo mágico, la forma de interactuar con el entorno es responsabilidad de todos. Lo más importante es respetar la flora, la fauna y todos los paisajes que visitamos para no alterar nuestros ecosistemas.

Tomar un descanso de las actividades cotidianas no implica que nos olvidemos de los hábitos que hemos adoptado para cuidar de nuestro medio ambiente. Al contrario, compartamos y difundamos las buenas prácticas e iniciativas para generar cambios positivos. Elijamos tener una vida cada vez más sustentable, una vida circular.