El tipo de cambio ha seguido con tendencia a la baja por los mismos tres factores que lo apreciaron en 2022:

1. Los flujos de dólares que han llegado del exterior por exportaciones, remesas e inversión extranjera directa.

2. La política monetaria restrictiva del Banco de México que mantiene un diferencial amplio de tasa de interés respecto a Estados Unidos.

3. La preferencia a nivel internacional por invertir en divisas que tengan una buena perspectiva, como el peso mexicano, dado que 1) el peso es la divisa más líquida de toda Latinoamérica, 2) se espera que por el nearshoring entre una mayor cantidad de divisas al país, 3) hay menor probabilidad de recesión en Estados Unidos y

4) la guerra comercial entre Estados Unidos y China se ha intensificado lo cual beneficia al comercio de México.

Desde el cierre del 2022 de 19.4999 y hasta el mínimo del año, alcanzado el 28 de julio de 16.6262 pesos, el peso se ha apreciado 2.87 pesos o 14.74%. Es posible que el peso se siga apreciando, ya que los inversionistas a nivel internacional quieren seguir aprovechando los rendimientos que la divisa puede otorgar.

El siguiente nivel técnico a romper sería el de 16.50 y después el de 16.40 pesos por dólar que podría ser el mínimo del año.

Si no hay factores que causen aversión al riesgo global o factores que causen miedo sobre México, el tipo de cambio podría seguir a la baja alcanzando un mínimo en el año de 16.40 pesos por dólar. Para el cierre del año se estima un tipo de cambio alrededor de 17.30 pesos por dólar, ante toma de utilidades y ajustes de posiciones de inversión en anticipación a las elecciones de 2024 en México y Estados Unidos.