El peso mexicano no cede a las pérdidas frente al dólar estadounidense. Luego de que el día de ayer, un informe de empleo más débil de lo esperado en Estados Unidos y la mejora en el sentimiento del mercado han sido factores que profundizaron las pérdidas del peso. Al momento de redacción el peso cotiza en 18.01 unidades por dólar.

Desde la perspectiva del análisis técnico se puede observar una tendencia desfavorable para el peso. La tendencia del mercado para el peso mexicano cambió a bajista (bearish) el día de ayer después de que el par superó la media móvil de 200 días en 17.80 y los compradores recuperaron la cifra de 18.00 para registrar un nuevo máximo. Por lo tanto, el peso mexicano podría extender sus pérdidas más allá del máximo del 4 de octubre en 18.21 y probar la resistencia en el máximo del 5 de abril ubicado en torno a 18.40 unidades, en camino hacia el mínimo anual de abril de 2018 sobre los 18.60 unidades por dólar. Por otro lado, si el peso llegara a retomar la tendencia bajista por debajo de las 18.00 unidades, se dirigiría a la media móvil de 20 días en 17.40 unidades.

Las cifras de empleo en Estados Unidos se situaron en 89,000, por debajo de las previsiones de 153,000, mientras que el PMI de servicios se situó en 53.6, tal y como preveían los analistas, aunque se ralentizó moderadamente. Lo que frenó levemente las ganancias para el dólar.

Por otro lado, el PMI manufacturero global de México de septiembre se situó en 49.8 puntos, cayendo por debajo del 51.2 de agosto, lo que es una posible señal de que la economía mexicana podría desacelerarse.

En su última reunión de política monetaria el Banco de México mantuvo las tasas en 11.25% y revisó sus previsiones de inflación del 3.5% al 3.87% para 2024, por encima del objetivo del banco central del 3% (más o menos un 1%).

Hacia adelante, de acuerdo a la encuesta de septiembre de Banxico entre economistas, se espera que las tasas de interés se mantengan en 11.25%, que la inflación baje a 4.66% y que el tipo de cambio cierre el año en torno a 17.64. A pesar de ello, no se ve una tendencia positiva para el peso mientras el dólar continúa rompiendo los niveles a desafiar.