La sostenibilidad tiene cada vez mayor presencia y protagonismo en las conversaciones empresariales, estratégicas, políticas y sin duda
se ha tomado foros, conferencias y discusiones a lo largo y ancho del país. Ade más es un gran tema nacional e internacional. Sin embargo, a la hora de diseñar estrategias eficientes de marketing y comunicación surge un gran interrogante:

Los consumidores ¿Hablan el mismo lenguaje?; ¿Tienen el mismo nivel de comprensión?; ¿Qué expectativas tienen?; ¿Quién es el responsable de tomar acciones?.

Por ello, la agencia de investigación de mercado y opinión pública, Quiddity realizó un estudio en México sobre percepciones sobre sostenibilidad. El estudio recorre varias áreas (desde el entendimiento del concepto hasta el rol de distintos actores de la sociedad) Te comparto algunos hallazgos, entre los que destacan:

+El 30% no logran mencionar empresas que realicen acciones sostenibles y el 20% no tiene conocimiento de empresas que hagan acciones sostenibles.

+A la hora de elegir un producto, las acciones de sostenibilidad y RSE que realice la empresa son un driver de compra importante. Las acciones de RSE son mencionadas al mismo nivel que Variedad de opciones(71%) y por sobre Servicio al Cliente (69%)

+El 30% cree que las acciones sostenibles de los fabricantes impactaría “mucho” en su decisión al momento de elegir una marca

+El 46% declara estar dispuesto a pagar entre un 6% y un 15% más por un producto de una empresa que realice acciones de sostenibilidad. Siendo Alimentos, cuidado e higiene personal y limpieza las categorías con mayor predisposición a pagar más.

Destaca la familiaridad con el término viene atada a conceptos concretos que socialmente y en comunicación son más comunes: ESR, medio ambiente. La Base fue de 466 casos, quienes al involucrar conceptos de menor adopción, como Economía circular, se comienza a ver la profundidad real del entendimiento de lo que sostenibilidad puede representar.

Sin embargo, el rol del Estado como principal precursor está bastante desdibujado y se demanda una participación activa al Estado, como guía en el proceso y el camino hacia un desarrollo sostenible.

Los sectores que se perciben más involucrados tienen un vínculo más directo con el medio ambiente: el agro, energía minería y petróleo e industria alimentaria.