Pemex, la petrolera estatal mexicana espera acceder a financiamiento a tasas más favorables con un plan de sostenibilidad que establece sus compromisos para reducir emisiones, dijo el director de finanzas de la empresa.

Los inversores de bonos, que poseen la mayoría de la deuda financiera de Pemex que asciende a más de 100,000 millones de dólares, consideran desde hace tiempo que la empresa está rezagada en la carrera mundial por la transición a fuentes de energía renovables en vez de combustibles fósiles.

La atención a la agenda de temas ASG (ambiental, social y de gobierno) indudablemente ha formado parte de las cuestiones que también nuestras contrapartes financieras y nuestros grupos de interés han pedido que observemos», dijo el director de finanzas de Pemex, Carlos Cortéz.

«En la medida que (…) nos adecuemos a la atención de esos temas, pues tendremos acceso a esas fuentes de financiamiento cada vez más restringidas y que, también, en la medida que califiquemos, podemos acceder a condiciones más amables», añadió.

El plan llega cuando las opciones de financiamiento se están agotando para la empresa energética más endeudada del mundo.

En 2024, Pemex recibirá ayuda del Gobierno por 145,000 millones de pesos (8,700 millones de dólares) para hacer frente a sus obligaciones de deuda. También ha recibido recortes en su mayor tasa impositiva, el Derecho a la Utilidad Compartida (DUC).

Según el plan de sostenibilidad, Pemex pretende reducir las emisiones de metano en un 30% de aquí al 2030 con respecto a 2020. Además, prevé reducir la quema rutinaria de gas al 2% este año y a cero en 2030.

No estaba claro cuánto tendría que gastar la empresa para alcanzar estos objetivos y para cumplir su ambición de cero emisiones netas en 2050.

En la última década, México ha etiquetado cientos de millones de dólares en gasto en infraestructura de combustibles fósiles en la empresa estatal de electricidad, CFE, como gasto para hacer frente al cambio climático y promover la transición energética.