En un mundo competitivo y globalizado, el financiamiento tiene un rol estratégico como detonador de desarrollo y capitalización de las empresas para cubrir brechas financieras; la industria manufacturera depende en gran medida del acceso a éste para mantener su crecimiento. Así lo dio a conocer MUNDI, compañía de tecnología financiera que ha capitalizado a más de 500 empresas exportadoras en el país con sus servicios de financiamiento, facilitando transacciones de México a casi 60 países.

Datos de MUNDI revelan que de las empresas manufactureras que han usado sus servicios de financiamiento han reportado, en promedio, hasta un 30% de crecimiento en sus ventas internacionales, exportando no sólo a Estados Unidos y Canadá sino a China, Japón y Corea, además de Alemania, España y Holanda.

México se está convirtiendo en un centro manufacturero especializado y el sector es un componente clave en el crecimiento económico y el desarrollo del país. La Secretaría de Economía reportó que la industria manufacturera atrajo  $16,653 millones de dólares en Inversión Extranjera Directa (IED) al segundo trimestre de este año, reconfigurando los destinos de dicho capital a lo largo del territorio. Ciudad de México, Nuevo León, Baja California, Estado de México y Guanajuato concentraron el 68% del capital, proveniente de Estados Unidos, Alemania y Japón, principalmente.

“Para aprovechar las oportunidades del mercado global, las manufactureras mexicanas requieren recursos financieros para invertir en tecnología e infraestructura. El financiamiento es esencial para expandir su capacidad productiva, ayudando a modernizar plantas e integrando innovaciones tecnológicas; factores vitales para aumentar la competitividad y cubrir las necesidades que les demanda el comercio exterior”, señala Paulina Aguilar, cofundadora y Chief Revenue Officer (CRO) de MUNDI.

La industria manufacturera en México es uno de los motores fundamentales de la economía nacional, contribuyendo con alrededor del 18% del Producto Interno Bruto (PIB) del país: $6.58 BDP al segundo trimestre de este año. Esta industria abarca una amplia gama de sectores, desde la producción de alimentos hasta la fabricación de alta tecnología.

“El acceso al financiamiento es un factor determinante para la evolución de la manufactura en México. Las empresas exportadoras que logren asegurar capital estarán mejor posicionadas para innovar, expandirse y competir en un mercado global cada vez más exigente”, resalta Aguilar.

Según el Censo Económico 2019 del INEGI, las entidades federativas con mayor producción manufacurera fueron Coahuila de Zaragoza, Nuevo León, Jalisco, Guanajuato y el Estado de México. Sin embargo, el Indicador Mensual de la Actividad Industrial por Entidad Federativa (IMAIEF) de abril 2024, coloca a Sonora, Oaxaca, San Luis Potosí, Morelos y Querétaro como las entidades con mayor crecimiento mensual en su actividad industrial, con cifras ajustadas por estacionalidad; el IMAIEF ofrece información a corto plazo, permitiendo seguir con mayor certeza el comportamiento de las actividades secundarias en las entidades federativas.

“De cara al futuro, la industria manufacturera en México se enfrenta a retos y oportunidades significativas. La adopción de tecnologías emergentes, como la automatización y la digitalización, será clave para mantener la competitividad del sector… y para implementarlas, las empresas exportadoras necesitan capital” resalta la cofundadora.

Algunas compañías de tecnología financiera (FinTech), como MUNDI, junto con el gobierno estatal y federal, las instituciones bancarias tradicionales y los organismos internacionales, juegan un papel crucial para las empresas mexicanas al ofrecer soluciones de financiamiento accesibles y adaptadas a las necesidades específicas de la industria manufacturera. Este apoyo de capital impulsa el crecimiento y permite a los empresarios mexicanos enfrentar los desafíos del comercio internacional y aprovechar nuevas oportunidades de negocio.