La Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) correspondiente a junio de 2021 muestra que durante el mes la población ocupada incrementó 0.18 millones de personas al pasar de 54.90 a 55.08 millones, mientras que la desocupada aumentó solamente 0.30 millones de personas para alcanzar un total de 2.31 millones. Lo anterior llevó a un aumento de la Población Económicamente Activa (PEA) de 0.20 millones de personas, y al crecer esta en menor proporción que el número de personas desocupadas, se produjo un incremento en la tasa de desempleo abierto de 0.03 puntos porcentuales, ubicándose en 4.02%.

También se observó un aumento de 0.50 millones en la Población No Económicamente Activa (PNEA), al pasar de 40.24 a 40.74 millones de mayo a junio, dentro de la cual el mayor incremento (0.32 millones) se dio en la población disponible, que consiste en aquella que no tiene ni busca empleo, pero aceptaría uno si se le ofreciera. Al incluir a esta población en el cálculo de la tasa de desempleo se obtiene una tasa extendida para junio 2021 de 15.96%, mayor en 0.40 puntos porcentuales que la del anterior (ver Fig. 1).

La pandemia afectó de muchas maneras al mercado laboral, más allá de la pérdida de empleos.

También se observó una disminución en las horas trabajadas para quienes conservaron su empleo, así como una baja en salarios ante la mayor oferta relativa de trabajo. Es importante recordar que, en abril del 2020 al comenzar la crisis, una gran parte de la población que perdió su empleo no pasó a formar parte de la población desocupada, sino de la disponible dado que no buscaban empleo.

Una manera de aproximar el número de afectados laboralmente por la pandemia, según la disponibilidad de datos proporcionados por la ENOE, es mediante la suma de los aumentos en las poblaciones desocupada, disponible y subocupada (aquella con necesidad y disponibilidad para trabajar más horas) respecto de un mes de referencia previo a la pandemia (febrero 2020). A junio de 2021, el número de personas afectadas, según esta medida, es de 4.67 millones.

Respecto al máximo de 20.50 millones de afectados observado en abril 2020, se puede hablar de que a junio se tiene una recuperación del 77%.

Por sector de actividad económica, se observa que el más afectado en términos relativos sigue siendo el secundario con una disminución de 4.5% respecto al nivel pre-pandemia (febrero 2020), seguido del terciario con un deterioro de 0.7%. Sin embargo, dentro del sector terciario solo se observa un desempeño positivo en los subsectores de servicios sociales (+17.6%) y organismos de gobierno e internacionales (+13.2%), mientras que el resto muestran contracciones significativas, especialmente los de restaurantes, bares, y hoteles (-8.6%) (ver Tabla 2).

Para los próximos meses se espera una disminución en el ritmo de recuperación ante el repunte de casos de COVID-19 a nivel nacional, lo cual ha provocado que las autoridades refuercen las medidas de distanciamiento social y se limiten los horarios de operación en muchos establecimientos. Si bien las vacunas han demostrado ser poco menos efectivas contra la nueva cepa Delta de coronavirus, las tasas de hospitalización son significativamente menores a las observadas en los picos de contagios de las primeras dos olas, por lo que es muy poco probable que la economía regrese a un estado de confinamiento como en el comienzo de la pandemia.