Otoño e invierno son para muchos sus estaciones preferidas debido a las celebraciones y festividades, sin embargo, este periodo del año también se caracteriza por días con bajas temperaturas y por ello, un mayor riesgo de contraer alguna enfermedad respiratoria como el resfriado común. Debido a eso, es frecuente que en esta temporada las familias mexicanas consuman más platillos calientes y nutritivos, como el caldo de pollo, el problema es que muchas veces sobra el caldo y no siempre se nos ocurre como aprovecharlo.

El caldo de pollo brinda múltiples beneficios pues contribuye a un mayor consumo de agua, proteína y verduras en una misma preparación, combinación que resulta útil para apoyar al sistema inmunológico, además de ser un platillo delicioso y reconfortante. A fin de evitar el desperdicio del caldo, Unilever te comparte cuatro recomendaciones para aprovecharlo:

Aligera tu salsa
Una opción muy útil es congelar el caldo de pollo sobrante en una bandeja de hielos, a fin de tener los cubitos disponibles para utilizar posteriormente en preparaciones más pequeñas como las salsas.

En ocasiones cuando elaboramos una salsa, puede quedar demasiado densa o concentrada, por lo que añadir el caldo hará que la preparación sea más ligera, tanto en consistencia como en sabor. Prueba este truco al elaborar una rica salsa ranchera con chile de árbol seco o una salsa taquera con chiles cuaresmeños.

Prepara una sopa
Si la cantidad de caldo de pollo que te sobró es mucha, entonces puedes congelarla para convertirla posteriormente en una deliciosa y calientita sopa para llenarte de energía en aquellos días fríos.

Lograrlo es muy sencillo, solo añade vegetales cocidos, pueden ser zanahorias, brócolis, calabazas, espinacas, chayotes, acelgas, chilacayotes, papas, cebollas e incluso espárragos, no hay límite. Así, obtendrás una sopa nutritiva con mucho color, sabor y textura.

Brinda sustancia a una crema
El caldo restante también es muy conveniente para añadir a las cremas de vegetales, ya que le dará una sazón especial a través del rico sabor del pollo, manteniendo la consistencia cremosa.

Aplica este tip al preparar una crema poblana a base de chiles poblanos o una crema de pimiento, aprovechando los ingredientes que tengas en tu refri, como pimiento morrón rojo o del color que tengas a la mano.

Prepara otro platillo
Otra opción muy recomendable es utilizar el caldo de pollo como ingrediente para una nueva preparación, por ejemplo, puedes preparar unas enchipotladas de pollo, una receta sencilla que rinde para ocho personas y sólo toma 50 minutos.

Comienza por mezclar 500 gramos de carne molida de pollo con un sobre de Rinde Más de Knorr®, cocínala con cebolla y acelgas picadas. Para elaborar la salsa, hierve cuatro jitomates con ajo y cebolla, luego licúalos junto con tres chiles chipotles adobados y una taza de caldo de pollo, para después sofreírla y sazonarla al gusto. Finalmente, rellena las tortillas con el pollo guisado y báñalas con la salsa. Para decorar cada porción, puedes añadir una cucharadita de crema, queso rallado y algunos aros de cebolla morada.