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El peso tuvo un gran año en 2023

El peso mexicano cerró el año cotizando en 16.9673 pesos por dólar, mostrando una apreciación de 12.99% o 2 pesos y 53 centavos, siendo la
segunda divisa más apreciada en la canasta amplia de principales cruces, sólo debajo del peso colombiano, que se apreció 20.11% en el año. Así, el peso mexicano mostró la mayor apreciación anual desde que cotiza en régimen de libre flotación. La segunda mayor apreciación anual fue en 2012, cuando avanzó 7.77% o 1 peso y 8 centavos. Durante el 2023, el tipo de cambio cotizó en un promedio de 17.7373 pesos por dólar, siendo la menor cotización promedio desde 2015, cuando se ubicó en 15.8810 pesos por dólar.

En el año, el tipo de cambio tocó un máximo de 19.5355 pesos por dólar el 3 de enero y un mínimo de 16.6262 pesos por dólar el 28 de julio, no visto desde el 3 de diciembre del 2015. El mes con la mayor volatilidad fue marzo con 17.43% y el mes con la menor volatilidad fue junio con 5.75%.

El peso mexicano se depreció en: agosto (-1.76%), septiembre (-2.36%) y octubre (-3.59%), mientras que se apreció en enero (+3.39%), febrero (+2.83%) marzo (+1.42%), abril (+0.25%), mayo (+1.74%), junio (+3.18%), julio (+2.23), noviembre (+3.68%) y diciembre (+2.40%). La apreciación de enero a julio, representó el mayor número de meses consecutivos con apreciación para el peso desde el periodo de ocho meses entre diciembre del 2007 y julio del 2008.

El peso se apreció en el año debido a 1) flujos de dólares por exportaciones, remesas e inversión extranjera directa, 2) amplio diferencial de tasas de interés entre México y Estados Unidos y 3) expectativa de mayor oferta de dólares en el futuro en México, por crecimiento de las exportaciones e inversión extranjera directa, ante la oportunidad del nearshoring. Al peso también le ayudó que el sexenio está próximo a terminar y no se materializaron los riesgos de perder la autonomía del Banco de México o de perder el grado de inversión de la calificación crediticia de la deuda soberana de México. Por eso, en septiembre después de publicarse el Paquete Económico 2024, el peso se depreció significativamente, ante el riesgo de deterioro en la perspectiva o recorte en la calificación crediticia de México, debido al déficit presupuestario de 4.9%, el mayor desde 1988.

El crecimiento, aunque desacelerado, de las exportaciones y remesas dio fundamento a la apreciación sostenida del peso, pero fue la expectativa sobre la oportunidad del nearshoring lo que dio el mayor impulso al peso, al punto de mostrar la mayor apreciación anual en registro, desde que se tiene el del reporte de empleo y de inflación de Estados Unidos fueron los principales catalizadores de volatilidad cambiaria. La menor probabilidad de recesión en Estados Unidos ocasionó en algunos meses optimismo y en otros, aversión al riesgo, por la posibilidad de una Fed más agresiva en su política monetaria.

Cabe mencionar que el peso se apreció en noviembre y diciembre, paralelo a la acumulación de posiciones especulativas a favor del peso en el mercado de futuros de Chicago y la entrada de dólares por regreso de capitales por mayor tenencia de valores gubernamentales por parte de residentes en el exterior. En noviembre y diciembre, las posiciones especulativas netas a la espera de una apreciación del peso se incrementaron en 56,452 contratos o 180.38%, ubicándose en 87,749 contratos, cada uno de 500 mil pesos, mientras que en noviembre entraron al país 18,408.37 millones de pesos en inversión en valores gubernamentales y en diciembre, hasta el día 19 (último dato disponible) la entrada de capitales fue por 59,740.07 millones de pesos.

Para 2024 se estima que el peso mexicano siga favorecido por flujos de exportaciones y remesas. Sin embargo, se espera que el Banco de México comience a recortar su tasa de interés a partir del primer trimestre, lo que podría ejercer presiones al alza para el tipo de cambio si la Reserva Federal decide esperar hasta el segundo trimestre para hacer el primer recorte de la tasa de interés. Además, el factor nearshoring, que en 2023 impulsó en gran medida al peso, podría tomar una pausa ante el proceso electoral de México y Estados Unidos.

Es importante mencionar que el 3 de octubre, el líder de la mayoría republicana de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy fue removido, siendo la primera vez que esto sucede en la historia. Por su parte, en México, ocurrió el impacto el Huracán Otis el 24 de octubre, afectando gravemente a la población de Acapulco.

En octubre el peso típicamente se deprecia 1.16% en promedio, de acuerdo con información histórica entre 1995 y 2022. La depreciación del peso en el mes fue consistente con el desempeño histórico del tipo de cambio. En octubre el dólar se fortaleció por la expectativa de que la Reserva Federal mantendría una postura monetaria restrictiva y por un surgimiento de la aversión al riesgo tras el comienzo del conflicto entre Hamás e Israel en Palestina. Además, en México se elevó la aversión al riesgo por la noticia de que se modificarían tarifas aeroportuarias, la aprobación de la iniciativa de la Ley de Ingresos, la integración del Panel de controversias en contra de México relacionado al maíz transgénico y la desaparición de los fideicomisos del Poder Judicial de la Federación.

En el mes el dólar se fortaleció por tercer mes consecutivo. El peso mexicano se ubicó en la tercera posición entre las divisas depreciadas. Las divisas más depreciadas en octubre fueron: el shekel israelí con 5.98%, la corona noruega con 4.51%, el peso mexicano con 3.59%, la lira turca con 3.21%, el dólar neozelandés con 2.96%, la rupia de Indonesia con 2.75% y la corona sueca con 2.44%.

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