Asentamientos irregulares ocasionan pérdida de bosque en La Magdalena Contreras a un ritmo sin precedente Mundo Verde por Vicente Anguiano - marzo 21, 2024marzo 30, 20240 El Día Internacional de los Bosques es una efeméride proclamada por la Asamblea General de las Naciones Unidas y el Centro de Investigación Forestal Internacional (CIFOR) con el objetivo de sensibilizar a la sociedad sobre la importancia crítica de los bosques para la captación del agua, el bienestar humano y la biodiversidad. Sin embargo, a pesar de los esfuerzos internacionales de concientización, el estado de los bosques continúa deteriorándose en países como México, donde según la Comisión Nacional Forestal (CONAFOR) la invasión y deforestación provocaron la pérdida de más de 4 millones de hectáreas de este ecosistema entre los años 2001 y 2021. Entre los bosques mexicanos que se encuentran amenazados destaca el caso del Parque Natural La Cañada, un área ecológica de 108 hectáreas de suelo de conservación ubicada en la demarcación territorial La Magdalena Contreras de la Ciudad de México. En 2021, La Cañada fue reconocido por el gobierno capitalino como un parque privado de acceso público gratuito creado a partir de la colaboración entre el sector público, la iniciativa privada y la comunidad de La Magdalena Contreras para regenerar la funcionalidad ambiental de una zona que resguarda más de 1 millón de m2 de bosque de pino-encino, 2.5 km del cauce del río Magdalena, 105 especies de aves, 28 especies de reptiles y 27 especies de mamíferos. Así mismo, el parque mantiene una relevancia hidrológica crítica para la Ciudad de México ya que infiltra más de 864 mil litros por día al acuífero capitalino. Sin embargo, a pesar de su relevancia ambiental, el Parque Natural La Cañada sufre un alto grado de invasión ocasionado por asentamientos irregulares de uso agrícola y habitacional. Horacio Bonfil, biólogo y director ambiental del Parque Natural La Cañada, señaló que «en los últimos 3 años, los asentamientos que invaden el parque crecieron un 30%; una cifra sin precedente desde que inició el monitoreo privado de la zona forestal en 1968”. En el mismo sentido, la Secretaría del Medio Ambiente (SEDEMA) del Gobierno de la Ciudad de México ha reiterado que “los asentamientos humanos irregulares en el suelo de conservación del área de La Cañada provocan graves daños ambientales, principalmente porque el drenaje de las viviendas desemboca directamente al río Magdalena”. Si bien una de las prioridades del parque es salvaguardar el uso de suelo de preservación ecológica, «el grado actual de invasión en el bosque y el río representa una amenaza grave para la conservación y no podrá ser contenida sin la participación de las autoridades competentes”, apuntó Bonfil. En la práctica, los asentamientos agrícolas y de vivienda que invaden el bosque de La Cañada están ocasionando un proceso ilegal de cambio del uso de suelo que se contrapone con el Programa Delegacional de Desarrollo Urbano para La Magdalena Contreras que la entonces Asamblea Legislativa (hoy Congreso de la Ciudad de México) decretó en 2005 y que continúa vigente hasta hoy. Santiago Gatica, abogado y coordinador del Parque Natural La Cañada, señaló que con el objetivo de contener el crecimiento exponencial de los asentamientos irregulares que depredan la zona, en octubre de 2022 la directiva del parque interpuso una serie de denuncias penales ante la Fiscalía de Investigación en Delitos Ambientales y en materia de Protección Urbana de la Ciudad de México por los delitos de invasión u ocupación y cambio de uso de suelo. Sin embargo, “la investigación está detenida porque las instancias públicas llamadas a participar en la investigación se negaron repetidamente a efectuar las visitas de reconocimiento solicitadas por la Fiscalía», explicó Gatica. Hoy, en el marco del Día Internacional de los Bosques es importante recordar que las personas que ocupan, invaden o desarrollan actividades agrícolas o de vivienda en suelo de conservación en la Ciudad de México son responsables por la comisión de delitos ambientales con pena de 3 a 9 años de prisión y 1 mil a 5 mil días de multa. A manera de conclusión, integrantes de la directiva del parque, miembros de su voluntariado, representantes del Comité de Comerciantes de La Cañada y vecinos de la demarcación, solicitaron el apoyo de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJ), la Alcaldía La Magdalena Contreras y la Dirección General de la Comisión de Recursos Naturales y Desarrollo Rural (DGCORENA) capitalina para dar seguimiento a la investigación y contener la invasión de la zona protegida. Compartir en Facebook Compartir Compartir en TwitterTweet Compartir en Pinterest Compartir Compartir en Linkedin Compartir Compartir en Digg Compartir