Como parte de la continua labor de la banca por ser un sector cada vez más socialmente responsable e impulsar los asuntos vinculados con el medio ambiente, la Asociación de Bancos de México (ABM), firmó un Memorando de Entendimiento con el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en México y la Cooperación Alemana al Desarrollo Sustentable (GIZ, por siglas en alemán); así como un convenio de colaboración con el Instituto Global para el Crecimiento Verde (GGGI, por sus siglas en inglés), reafirmando así su compromiso por trabajar en un sistema financiero más sostenible.

La 87 Convención Bancaria: “El progreso de México, responsabilidad compartida”, fue el marco para signar ambos acuerdos con los que la ABM avanza con su propósito de contribuir a una economía resiliente al cambio climático y a la mejor calidad de vida de las personas.

El Memorando de Entendimiento firmado con el PNUD y la GIZ busca, además de difundir e integrar mejores prácticas de construcción y reconstrucción, en concordancia con las metas y compromisos de México con el Acuerdo de París y con los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030, permitir que los bancos asociados a la ABM promuevan entre sus clientes que los proyectos de construcción o reconstrucción a financiarse por crisis y/o desastres naturales en Acapulco, Guerrero, y municipios aledaños, se realicen bajo las recomendaciones de la Guía de Recomendaciones para la Reconstrucción en Acapulco, después del huracán Otis, 2024, del PNUD y la GIZ. Esta guía, realizada con base en los Lineamientos emergentes para la construcción y reconstrucción integral de la franja costera del estado de Guerrero, emitidos en diciembre de 2023, y a su vez, revisada por el equipo de la ABM para añadirle una sección sobre la participación del sector financiero, busca apoyar a los gobiernos y al sector privado en la etapa actual de reparación y reconstrucción de hoteles, restaurantes y condominios, en Acapulco.

Además de realizar programas piloto con instituciones bancarias interesadas, en los que se midan los efectos positivos de la inversión en términos ambientales y sociales, esta alianza dará cabida a la promoción de actividades de capacitación y difusión, con la ayuda de actores clave del sector social, privado, académico y gubernamental, para lograr que la resiliencia y la sostenibilidad formen parte de la planeación y ejecución de proyectos, negocios, infraestructura, al tiempo que se consideran los temas vinculados con la promoción del financiamiento en el sector turismo.

Al respecto, el presidente de la Asociación de Bancos, Julio Carranza Bolívar, destacó que a pesar de que los esfuerzos de reconstrucción tras desastres naturales suelen tener respuesta inmediata, es necesaria una “colaboración multiactor” como la que, dijo, “hoy formalizamos a fin de promover medidas para una cultura resiliente al cambio climático”.

Agregó que las recomendaciones detalladas en el documento referido consideran elementos arquitectónicos que permiten resistir velocidades del viento de hasta 250 kilómetros por hora. Estos elementos consideran también desde tipos de cubierta, materiales en fachadas, muros falsos, ventanas y techos, hasta el mejor manejo de los ecosistemas en donde se construye, así como consideraciones para la operación de dicha infraestructura ante sucesos derivados del calentamiento global.

“La oportunidad de acompañar al sector de la construcción con prácticas resilientes y sostenibles es significativa. La cartera de la banca comercial a este sector es de 517 mil millones de pesos, cifra que equivale al 43% del crédito a las actividades secundarias del sector privado”, detalló Julio Carranza tras agradecer tanto al PNUD como a la GIZ, su colaboración en esta iniciativa que enfrenta de forma efectiva los desafíos del cambio climático, y en específico, fomenta la planificación urbana y protección de la sociedad, lo que le dará a Acapulco la capacidad de resistir y recuperarse en menor plazo ante eventos extremos como el Huracán “Otis”, sostuvo.

En el mensaje enviado por el Sr. Lorenzo Jiménez de Luis, Representante Residente del PNUD en México, éste agradeció a la ABM y a la GIZ el trabajo conjunto y resaltó que los desastres como el huracán Otis son a la vez una oportunidad para “reconstruir mejor” y, en este caso, contar con un Acapulco menos vulnerable y más seguro ante las previsiones de futuros huracanes y otros peligros climáticos y geológicos; “la participación de instancias del mundo financiero, como los bancos de México, así como de asociaciones y cámaras del sector turístico, junto a los gobiernos, es una práctica innovadora y exitosa que seguiremos apoyando y en su momento, difundiremos como un caso de éxito a nivel internacional», señaló el funcionario de la ONU.

Acerca de la labor que emprenderá la ABM con el Instituto Global para el Crecimiento Verde, el convenio de colaboración permitirá el desarrollo de actividades que fortalezcan y promuevan criterios Ambientales, Sociales y de Gobernanza (ASG), tanto al interior de la Asociación, como entre los bancos agremiados. Con el apoyo del GGGI se elaborarán estrategias que incluyan políticas ASG y planes de acción basados en mejores prácticas, iniciativas para disminuir brechas de género, desarrollo de productos financieros sostenibles, divulgar información ASG y gestión de riesgos climáticos, sociales y ambientales que permitan un mejor desarrollo del sistema bancario mexicano.

Además, con este acuerdo, el GGGI proporcionará apoyo para la implementación de la Taxonomía Sostenible de México en los procesos de la banca y la medición de aportaciones para alcanzar las metas establecidas en la Estrategia de Movilización de Financiamiento Sostenible.

En este contexto, Carranza Bolívar resaltó que la alianza que este día se formaliza marca un hito en el compromiso de la banca con la sostenibilidad y será un valioso aporte al trabajo que realiza la Comisión ASG de la ABM creada hace un año.

En este sentido, felicitó a los 24 bancos que durante los últimos 12 meses han mostrado avances en los indicadores de sostenibilidad e igualdad de género, alineados a las mejores prácticas internacionales y al Protocolo de Sostenibilidad de la ABM, así como a los pilares de trabajo del Comité de Diversidad e Inclusión de la propia Asociación.

Tras destacar las aportaciones hechas por el GGGI al sector bancario en el desarrollo de una economía más justa, el Presidente del gremio bancario del País indicó que la ABM ha diseñado una política ASG en donde se difunden los compromisos sostenibles. Entre las acciones a corto plazo a implementar, destaca el impulso que la banca dará a la Estrategia de Movilización de Financiamiento Sostenible; el desarrollo de una política de igualdad de género, así como el diseño de una guía con recomendaciones de políticas de paridad de género en órganos de toma de decisión.

La firma de sendos convenios de colaboración interinstitucional, estuvieron a cargo del representante residente del PNUD en México, Lorenzo Jiménez de Luis; el coordinador del Clúster de Clima de la GIZ, Philipp Schukat y el director Regional para América Latina y el Caribe del GGGI, Ferruccio Santetti.