FEMSA diseña programas con enfoque de género adaptados a la realidad organizacional para fortalecer sus acciones en materia de justicia, equidad, diversidad e inclusión y alcanza la meta de que, en 2030, el 40% de los puestos ejecutivos sean ocupados por mujeres.

Los programas ofrecen herramientas personalizadas para fortalecer el liderazgo, las habilidades adaptativas y la creación de redes de manera que tengan un impacto significativo en cada mujer participante. Además, se cuenta con esquemas de flexibilidad laboral que facilitan la conciliación entre la vida personal y profesional, posibilitando el crecimiento y desarrollo del talento de manera integral.

“En FEMSA, medimos y monitoreamos continuamente la participación de las mujeres en todos los niveles de contribución y áreas de la organización. Este seguimiento nos permite evaluar nuestros avances, identificar oportunidades de mejora y garantizar que nuestras estrategias sean efectivas y sostenibles. En nuestros informes anuales, compartimos datos detallados sobre la representación femenina en las diferentes unidades de negocio y geografías donde operamos”, explicó Jessica Ponce de León, Directora de Sostenibilidad de FEMSA.

Al cierre de 2024, el 45% de la fuerza laboral estaba conformada por mujeres en todas las unidades de negocios y geografías donde existen operaciones. En cargos de dirección y gerencia, FEMSA ha alcanzado un 33% de representación femenina, un avance considerable desde el 20% registrado en 2020.

“Nos hemos fijado una meta ambiciosa y pública de cara a 2030. Partiendo de nuestra línea base en 2020, hemos avanzado 13 puntos porcentuales en la inclusión de mujeres en puestos directivos en tan solo cinco años. Este objetivo impulsa el desarrollo del talento femenino y la implementación de indicadores de género que aseguran la sostenibilidad de nuestros esfuerzos a largo plazo”, subrayó Ponce de León.

Para promover la participación femenina en roles de liderazgo y toma de decisiones, FEMSA implementa acciones concretas como el análisis de datos, los programas de desarrollo y mentoría, los talleres sobre sesgos inconscientes, los paneles de sensibilización JEDI.

“Cada unidad de negocio cuenta con responsables JEDI y planes de trabajo personalizados que adaptan la estrategia corporativa a las realidades locales, combinando estandarización con flexibilidad según las necesidades específicas de cada operación”, detalló.

Desde 2022 la empresa cuenta con la Norma Corporativa de Justicia, Equidad, Diversidad e Inclusión (JEDI), documento que establece los lineamientos para garantizar un entorno laboral equitativo e inclusivo. Esta norma, de cumplimiento obligatorio en todas las unidades de negocio, asegura que la equidad de género sea parte integral de la estrategia organizacional. Igualmente, define los deberes de líderes y colaboradores, y establece mecanismos para prevenir y mitigar cualquier situación de desigualdad.

En el marco de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, FEMSA reafirma su compromiso de crear un entorno donde todas las personas, independientemente de su género, tengan igualdad de oportunidades para crecer y prosperar. Un esfuerzo continuo, donde aún queda mucho camino por recorrer, en pro de la justicia, la equidad y la inclusión.