Redacción

Como parte de su tarea como Banca Responsable, Banco Santander México y Zurich Santander, han donado a la fecha 125 mil raciones de alimentos calientes en apoyo al personal del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER) y del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición “Salvador Zubirán”, que enfrentan cotidianamente la pandemia del COVID-19.

Desde que inició la pandemia de COVID-19 en México, Santander implementó diversas acciones a favor de la comunidad, en particular para apoyar al personal médico que está al frente de la lucha, tocando aspectos desde el equipamiento para protegerlos, hasta hacerles llegar alimentos que les ayuden a soportar las jornadas de trabajo.

De esta forma, Santander México, con Zurich Foundation, Zurich Santander, y de la mano de Fundación Gigante, han hecho llegar directamente a las instalaciones de estos dos Institutos una comida balanceada y servida en el momento para el personal. Cada entrega se acompaña de una carta donde se agradece el esfuerzo del personal de salud por cuidarnos en estos momentos.

Al respecto, Marcela Espinosa Macías, Directora de Sustentabilidad de Santander México, afirmó que “nuestro compromiso con la sociedad continúa, y gracias a la alianza que hemos hecho con Zurich Santander y con Fundación Gigante, ya hemos repartido 125 mil raciones de alimentos al personal médico, de enfermería, camilleros y personal administrativo del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER), y del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición ‘Salvador Zubirán’; es nuestra forma de decirles gracias a nuestros héroes con bata, por cuidar de nuestra salud”.

La entrega de los alimentos calientes es posible gracias a una logística donde, por medio de la Fundación Gigante, las comidas se preparan en los restaurantes Toks, Presidente, Farolito, Beer Factory y Panda Express bajo estrictas medidas de higiene, y para transportarlos se usan unidades con cocina integrada que permiten servirlos en el momento, con un empaquetado especial que incluye los cubiertos, a fin de que el personal acceda a un platillo balanceado, previamente aprobado por la propia institución médica.

Se trata de una de las diferentes acciones en las que participa Santander como Banca Responsable desde que inició la contingencia por el COVID-19 en México.